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CUBA: CONSUME CUBAN PRODUCTS.
By Dr. Néstor García Iturbe
January 5, 2015
A CubaNews translation.
Edited by Walter Lippmann.
The phrase that has been used as the title of this article is intended for many people in our country for whom everything that is produced –or comes from– abroad has a high value and a special meaning.
Examples of this are seen when they use the words “clowns” instead of the Spanish payasos, “performance” instead of the Spanish actuación, trying to give a different meaning to something that can be perfectly expressed in Spanish. They think that with the foreign word the object may seem different and higher ranking.
Something similar happens when we invite a foreign scholar to offer a lecture on a Cuban subject, while in our country we do not give a national expert the chance to give the lecture.
As for books and newspaper articles something similar happens.
Recently an article was published –I received it on January 3rd this year– that said the Bush family had financed the rise to power of Adolf Hitler. The article gave as reference the book George Bush: The Unauthorized Biography (in the article the word Unauthorized was incorrectly translated as Indeseable [undesired]). It also said the authors are Webster G. Tarpley and Anton Chaitkin, and incorrectly labeled them as US Americans. This is a very interesting and real situation.
We must point out that in the book Estados Unidos, de raíz [The United States, from the Roots] published in Cuba by the Centro de Estudios Martianos in 2007 –that is, 11 years ago– a section is devoted to the links between US companies and persons, including the Bush family, with the regime of Adolf Hitler. The section begins on page 218 and ends on page 222.
The book mentions and explains in detail the cooperation between the Ford Motor Company and the Nazi regime and how this US company, in coordination with Hitler’s representatives, used the slave labor of Jews and other war prisoners in their industry. In 1939, the company gave Hitler a million marks for his fiftieth birthday, which was reciprocated with a medal the Nazi regime gave to Henry Ford.
General Motors was also involved in this type of activity. Nearly 300 United States companies were involved; some with subsidiaries such as German Steel Trust, one of whose owners was Clarence Dillon.
Among the law firms that provided assistance to the government of Hitler was the US American firm Sullivan and Cromwell, where one of its top executives was John Foster Dulles.
International Business Machines’ (IBM) services were highly regarded by the German regime; so much so that Adolf Hitler himself gave its founder, Thomas J Watson, the Cross of Merit of the German Eagle with a Star. The services of IBM and the census the company carried out for the Third Reich were used as the source for the arrest of Jews and the organization of the concentration camps.
Some banking companies joined this cooperation: Chase National Bank of Paris, a subsidiary of the Chase Manhattan Bank, owned by the Rockefeller family. The Union Banking Company also established strong relationships with the fascist regime. Two of its top executives were Prescott Bush and his father-in-law George Herbert Walker. They united their capitals with that of German Fritz Thyssen, a close friend of Adolf Hitler.
The rest of the story, and more details about it, can be found in the aforementioned book, published in Cuba, eleven years ago, written by a Cuban author from the barrio Juanelo in Luyanó. His name was Néstor García Iturbe.
Big Capital respects no borders and has no scruples when it comes to making money.
CUBA.- CONSUMA PRODUCTOS CUBANOS.
Por .Dr. Néstor García Iturbe
5 de enero 2015
La frase que se ha utilizado como título de este artículo, responde a una situación existente en nuestro país, donde todo aquello que se produzca o venga del extranjero, tiene para muchas personas un alto valor y un significado especial.
Eso sucede cuando a los payasos les decimos “clown”, a las actuaciones “performance”, tratando de que eso varíe el significado de algo que puede decirse perfectamente en español, pero que dicho de esa forma se trata de que parezca algo distinto y de mayor categoría.
Algo similar sucede cuando traemos un académico extranjero para que nos imparta una conferencia sobre un tema de Cuba, mientras que en nuestro país no le damos oportunidad de dar la conferencia a un experto criollo.
En cuanto a los libros y los artículos periodísticos sucede algo similar.
Recientemente se publicó un artículo, que lo recibí el día 3 de enero de este año, donde se planteaba que la familia Bush había financiado la ascensión al poder de Adolfo Hitler y se daba como referencia el libro George Bush The Unauthorized Biography (George Bush Biografía no autorizada, donde incorrectamente se tradujo la palabra Unauthorized como Indeseable ). Se plantea que los autores son los estadounidenses ( que se calificaron también incorrectamente como norteamericanos ) Webster G. Tarpley y Anton Chaitkin. Una situación muy interesante y verdadera.
No se puede dejar de señalar, que en el libro Estados Unidos, de raíz, publicado en Cuba por el Centro de Estudios Martianos en el año 2007, hace 11 años, se dedica un epígrafe a la vinculación de personas y empresas estadounidenses con el régimen de Adolfo Hitler, lo cual incluye a la familia Bush. Este epígrafe comienza en la página 218 y termina en la 222.
Se menciona y explica en detalle, la cooperación con el régimen nazi de la Ford Motor Company y como dicha empresa, en coordinación con los representantes de Hitler, utilizaron en la industria el trabajo esclavo de los judíos y otros prisioneros de guerra. Esta empresa entregó en 1939 un millón de marcos a Hitler por su cincuenta cumpleaños, lo cual fue compensado con una medalla que dicho régimen entregó a Henry Ford..
También la General Motors estuvo involucrada en este tipo de actividad, cerca de 300 empresas estadounidenses lo estuvieron, algunas con filiales como la German Steel Trust, de la que uno de sus propietarios era Clarence Dillon.
Dentro de las firmas de abogados que prestaron ayuda al gobierno de Hitler estuvo la estadounidense Sullivan and Cromwell, donde uno de sus principales ejecutivos era John Foster Dulles.
La empresa International Business Machine (IBM), cuyos servicios al régimen alemán fueron altamente reconocidos, cuando el propio Adolfo Hitler entrego a su fundador Thomas J Watson, La Cruz del Mérito del Aguila Alemana con Estrella.. Los servicios de la IBM y el censo realizado por esta empresa, se tomaron como base por el Tercer Reich para apresar a los judíos y organizar los campos de concentración.
Algunas firmas bancaria se sumaron a esta colaboración, como el Chase National Bank de Paris, filial del Chase Manhattan Bank, propiedad de la familia Rockefeller. También estableció fuertes relaciones con el régimen fascista, la Union Banking Company, donde uno de su principales ejecutivos era Prescot Bush y su suegro George Herbert Walker, los que unieron sus capitales con el alemán Fritz Thysen, amigo íntimo de Adolfo Hitler.
El resto de la historia y más detalles de la misma, pueden ustedes leerlo en el libro antes mencionado, publicado en Cuba, hace once años, escrito por un cubano, del Barrio de Juanelo, en Luyanó, cuyo nombre es Néstor García Iturbe.
Los grandes capitales no reconocen fronteras, ni tienen escrúpulos, cuando de ganar dinero se trata.