Coronavirus and Cuba: A Devastating Impact

Coronavirus and Cuba: A Devastating Impact

By Domingo Amuchastegui, received on April 8, 2020

A CubaNews translation. Edited by Walter Lippmann.

The rapid spread of this virus almost everywhere in the world poses very serious and complex challenges that go beyond the frameworks of a worrying pandemic to transcend the social-economic sphere in a thousand different ways. The virus has reached Cuba -on a very limited scale- and this forces us to assess what could be devastating consequences for a poor country, clinging to a system that has proven to be inoperative and a particularly harmful economic war on the part of the Trump administration. Examining such effects is what we are trying to do as a first approximation.

Tourism industry: Being the first source of income for the country, it is facing an immediate collapse or paralysis for a prolonged period, thus becoming a sort of Achilles’ heel for the current economic situation of the Island. A virtual chain reaction ensues with massive cancellations of visitors from abroad (Canada, Europe and the United States), a drastic – if not total – reduction in the movement of airlines and cruise ships from Europe, chaos in imports and logistics of this industry and the suspension of the important branch of international events that has distinguished Havana so much in previous years. In this sense, the postponement of the “The Nation and Emigration,” conference, which was scheduled for the beginning of April, has already been announced. It is very likely that a similar destination will host the International Tourism Fair -which is held every year- and other international events planned to take place in Havana .

Emigration: Cuban emigrants in the US and other countries (mainly Mexico and Spain) will be mostly inclined to cancel their trips to Cuba until the current situation is overcome, with the consequent reduction of income by this route for Cuba. As a result of the tensions within the US itself, remittances could also suffer significant reductions. This perspective will be aggravated if the initiative launched by the authorities in Miami and supported by the governor of Florida to put an end to all flights to and from Cuba is approved.

Foreign Trade: Cuba’s foreign trade will tend to suffer various consequences in relation to its imports and exports, taking into account that its main trading partners are China and the European Union (EU). In particular, imports essential to key industries and services (sugar, biopharmaceuticals, medical missions and others) may suffer a severe contraction. The reorientation of imports towards those more connected to health will inevitably lead to significant reductions in other areas.

Oil. Someone could say that the sharp fall in prices could benefit Cuba. Nothing could be further from the truth. The reason is quite simple: the two countries that owe Cuba the most for their medical services and others like Venezuela and Angola will have to postpone payments -as happened with the fall in prices years ago- thus adding another important effect on income. Venezuela may or may not compensate its debts to Cuba through additional oil shipments, but it will have to be seen whether this happens or not; if it does, Caracas would provide an important mitigating element. The same is true in the case of Angola. As for Russia and its multi-million dollar projects in Cuba -including oil prospecting and sales- we will have to see how this will be conducted, with very little optimism taking into account the numerous negative precedents of the last decades in the sphere of bilateral relations.

Economic Plan: This year’s Economic Plan is suffering serious disruptions as a result of the high reduction in hard currency income and the urgent reorientation of priorities towards the area of health and trying to ensure survival at markedly low levels. The impact on Cuba’s commitments with regard to the recent deferral of its foreign debt payments, and the guarantee that these would be made soon, will be no less disrupted and deferred.

Cuba will undoubtedly experience a unique crisis situation that will not be short-lived but rather a long and very complex one. From now on, it will face a very complex agenda of new challenges and priorities.

CORONAVIRUS Y CUBA: UN IMPACTO DEVASTADOR

Por Domingo Amuchastegui, Recibido el 8 de abril de 2020

La rápida propagación de este virus por casi todo el mundo plantea  muy serios y complejos retos que desbordan los marcos de una preocupante pandemia para trascender al ámbito económico-social de mil maneras diferentes. El virus ha llegado a Cuba -en una muy limitada escala todavía- y esto obliga a valorar lo que pudieran ser consecuencias devastadoras para un país pobre, aferrado a un sistema probadamente inoperante y una guerra económica particularmente perjudicial de parte de la administración Trump. Examinar semejantes efectos es lo que intentamos hacer a manera de una primera aproximación.

Industria turística: Siendo ésta la primera fuente de ingresos del país, se enfrenta a un inmediato colapso o parálisis por un prolongado período, convirtiéndose así en una suerte de Talón de Aquiles para la actual situación económica de la Isla. Una virtual reacción en cadena sobreviene con las cancelaciones masivas de visitants del exterior (Canadá, Europa y EEUU), de una reducción drástica -si no total- del movimiento de las aerolíneas y cruceros provenientes de Europa, caos en las importaciones y logítica de esta industria y la suspensión de la importante rama de de eventos internacionales que tanto ha distinguido a La Habana en años anteriores. En este sentido ya se anunció la posposición de la conferencia “La Nación y la Emigración,” que estaba prevista para comienzos de abril. Muy probable que un destino similar correrá la Feria Internacional de Turismo -que se celebra cada año- y otras actividades internacionales previstas para celebrarse en La Habana..

Emigración: Los emigrados cubanos en EEUU y otros países (principalmente México y España) se inclinarán mayoritariamente hacia la cancelación de sus viajes a Cuba hasta que no se supere la actual coyuntura, con la consiguiente reducción de ingresos por esta vía para Cuba. Producto de las tensiones dentro de los propios EEUU, las remesas podrán igualemente sufrir reducciones sensibles. Esta perspectiva se agrava si se aprueba la iniciativa lanzada por las autoridades de Miami y con respaldo del gobernador de la Florida de poner fin a todos los vuelos hacia y desde Cuba.

Comercio Exterior: El comercio exterior de Cuba tenderá a sufrir diversas consecuencias en relación a sus importaciones y exportaciones, tomando en cuenta que sus principales socios comerciales son China y la Unión Europea (UE). En particular, importaciones esenciales para industrias y servicios claves (azúcar, biofarmacéuticos, misiones médicas y otros) podrán sufrir una severa contracción. La reorientación de las importaciones hacia aquellas más conectadas a la salud, supondrán, inevitablemte, reducciones sensibles en otras esferas.

Petróleo. Alguien podrá decir que la brusca caída de los precios podrá beneficiar a Cuba. Nada más lejos de la realidad. La razón es bien sencilla: los dos países que más adeudan a Cuba por sus servicios médicos y otros como Venezuela y Angola, habrán de posponer pagos -como ocurrió con la caída de los precios años atrás- añadiéndose así otra importante afectación en materia de ingresos. Venezuela podrá o no compensar sus deudas con Cuba mediante envíos adicionales de petróleo, pero esto habrá que ver si se produce o no; de hacerlo, Caracas aportaría un importante element mitigante. Otro tanto es válido en el caso de Angola. En cuanto a Rusia y sus proyectos multimillonarios en Cuba -incluyendo la prospección y venta de petróleo- habrá que ver cómo se conducirá esto, con muy poco optimismo tomando en cuenta los numerosos precedentes de signo negativo de las últimas décadas en la esfera de las relaciones bilaterales.

Plan Económico: El Plan Económico del año en curso sufre graves trastornos como consecuencia de la elevada reducción de ingresos en moneda fuerte y la imperiosa reorientación de las prioridades hacia la esfera de la salud y de intentar garantizar la sobrevivencia a niveles marcadamente bajos. Las repercusiones sobre los compromisos de Cuba con respecto al reciente aplazamiento de sus pagos en materia de deuda externa y la garantía de que los mismos se producirían próximamente, sufrirán no menos trastornos y aplazamientos.

Sin dudas, Cuba atravesará una situación única de crisis que no abarcará un corto período de tiempo, sino una larga y complejísima coyuntura. En lo adelante, se enfrentará a una complejísima agenda de nuevos desafíos y prioridades.