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La Habana, miércoles 4 de noviembre de 2009. Año 13 /
Número 309
Entrevista al Embajador de Laos
Lazos solidarios comunes
ARNALDO MUSA
musa.amp@granma.cip.cu
"Cuba puede
ser bloqueada económicamente, pero jamás su esperanza", expresó Khampho
Khaykhamphithoune, embajador de la República Democrática Popular de
Laos, en ocasión del aniversario 35 del establecimiento de las
relaciones diplomáticas entre ambas naciones socialistas.
El diplomático
afirmó que Laos recibe con regocijo y hace suyo, el nuevo triunfo cubano
en Naciones Unidas, con el rechazo abrumador al criminal bloqueo
impuesto por Estados Unidos a la Isla desde hace casi 50 años, e indicó
que en ese sentido el viceprimer ministro y canciller, Thongloun
Sisoulith, se pronunció en la ONU.
Khampho recordó que
cuando Cuba y Laos establecieron relaciones diplomáticas el 4 de
noviembre de 1974, su país aún no había proclamado la República e
internacionalistas cubanos estaban presentes ya en las regiones
liberadas, cuya población vivía mayoritariamente en profundas cuevas,
soportando masivos y continuados bombardeos de la aviación
estadounidense.
Calificó de
paradigma para su pueblo el ejemplo de la Revolución cubana, y destacó
que Laos enfrenta decisivamente todo tipo de terrorismo, por lo cual
apoya la liberación de los Cinco Héroes cubanos presos injustamente en
cárceles de EE.UU. por alertar, precisamente, de acciones terroristas.
Anunció que
Vientiane acogerá en marzo próximo la V Conferencia Asia-Pacífico de los
amigos de Cuba en esa región, organizada por la Asociación de Amistad
Laos-Cuba, en colaboración con el Instituto Cubano de Amistad con los
Pueblos.
Apuntó que todo ello
es consecuente con la política exterior laosiana de paz, independencia y
no injerencia en los asuntos internos de otras naciones, expresión
compartida con La Habana en el seno del Movimiento de los Países No
Alineados, en el Grupo de los 77 y en otros foros internacionales.
El embajador aseveró
que su patria mantiene firme su decisión de construir el socialismo,
afianzar en el pueblo las convicciones revolucionarias y mantener su
amplio programa de renovación, con halagüeños resultados desde su
implantación en 1986.
Al respecto, dijo
que son palpables los éxitos de la estabilidad política del país, el
orden social —donde se redujo del 45% al 27% el índice de pobreza— y el
sector económico, a pesar de la crisis financiera mundial.
Antes de concluir,
el diplomático expresó su deseo de que las relaciones entre las dos
naciones hermanas se profundicen y diversifiquen en todas las esferas, y
que se mantengan estrechas como hasta ahora, con los mismos principios e
ideales.
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