Celia Hart
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Regreso de Cuba con
renovada ilusión. En estos días pasados vi un país y un pueblo
que mantienen viva la llama de aquella revolución triunfante en
1959. Cuba hoy por hoy es el único país socialista del mundo.
Con errores y con muchos aciertos, mantienen las conquistas
básicas de la revolución. A pesar de ello es necesario que
realicen rectificaciones que potencien el modelo socialista. Los
cambios que necesita Cuba no están ni en Miami ni en el modelo
chino. Los cambios los tiene que encontrar en la profundización
del proceso revolucionario. El gobierno tiene que generar una
"nueva revolución, dentro de la revolución", que entusiasme
y movilice a su pueblo detrás de la conducción de Raúl Castro,
en una nueva etapa de construcción socialista.
El hermano menor de
Fidel, tiene entre otros desafíos, encabezar la lucha contra la
burocracia, uno de los peores males del socialismo, heredado del
modelo estalinista. También tendrá la misión de luchar contra la
corrupción, una enfermedad social extendida, debido a las
necesidades económicas de la población, provocadas
fundamentalmente por el bloqueo norteamericano. En estanueva
etapa de Cuba, tendrá que potenciar el estimulo social, la
productividad en el trabajo y el salario digno. No es bueno que
existan dos economías: la del dólar y la del peso. La que llega
en remesas de dinero del exterior o el turismo y la economía de
la sobrevivencia. Estas dos economías paralelas generan
injusticias y desigualdades. En definitiva potencian
frustraciones sociales. No es posible que el portero de un
hotel, gane varias veces más que un medico. Estas
contradicciones si no son subsanadas, corren el riesgo de
volverse contra la propia revolución, minando la moral
socialista.
Después de esta
modesta reflexión, que no se entienda como intromisión, en los
problemas de Cuba, aunque considero que esta revolución no es
solo de los cubanos, sino de todos. Quiero contarles, que fui a
La Habana para presentar mi ultimo libro "Cuba, os galegos e o
Che". Tuve el honor y la suerte de tener como "guía" a la
destacada escritora Celia María Hart Santamaría, hija de dos
emblemáticas figuras de la revolución: Armando Hart y Haydeé
Santamaría (hija de Benigno Santamaría nacido
enPrexigueiro-Ribadavia). Con Celia recorrimos una parte de la
historia de la revolución cubana. Fueron días intensos y
emotivos. Ella me enseño a mirar con otros ojos la revolución.
Recorrimos el pensamiento de José Martí y de Julio Antonio
Mella. Le conté mi amor por Tina Modotti, ella me dijo que
sentía lo mismo por Mella. Trasnochamos el malecón, hablamos de
Trotski y de Guevara. Siempre estaba el recuerdo de Abel
Santamaría y el de su madre "Yeye", tanto en la Sierra Maestra,
como cuando dirigía la Casa de las Américas. Me hablo con
devoción del Fidel. Se definió ante todo como Fidelista. Me
contó en confianza, su último cabreo con Chávez, por las
recomendaciones a las FARC, tema que ella le regaño
públicamente. A pesar de esta "metida de pata" confía en la
revolución bolivariana, como lo hizo desde el primer día. Y
espera que Chávez sepa rectificar.
Mi destacada "guía"
después del Comandante Fidel Castro, es la escritora cubana en
Internet, más leída en el mundo. Sus artículos de opinión son
colgados por centenares de pagina web alternativas. Su estilo
directo y comprometido con la revolución mundial la ha
convertido en una referente de consulta. En tan solo unos años,
esta física de profesión, se proyecto como una pensadora crítica
anticapitalista, comprometida con los nuevos tiempos que corren.
En mi último día de
permanencia en La Habana fuimos con Celia hasta el monumento
donde están las cenizas de Julio Antonio Mella, frente a las
históricas escalinatas de la Universidad. Tenia ganas de estar
allí. Sentía emoción. Mella fue uno de los primeros marxistas de
America, junto aJosé Carlos Mariátegui.
Celia María como a
mi me gusta decirle y le decía su madre, no paraba de contarme
historias de la revolución y yo de preguntarle. Quería saber
todo, en poco tiempo. Tenia avidez de conocer las historias
nunca contadas y ella me seguía contando…Sus reflexiones eran
siempre en defensa de la revolución cubana. Eran sinceras,
criticas, revolucionarias, esperanzadoras.
Celia junto a
Mariela Castro (hija de Raúl)directora del Centro de Educación
Sexual, son a mí entender, el aire fresco que esta necesitando
esta revolución. Dos hijas del socialismo, que están
trascendiendo dentro y fuera de Cuba, por su pensamiento
innovador y revolucionario.
Con Celia, pude ver
Cuba desde "otra mirada", no la del "turista de izquierda" que
todo le gusta sin reflexionar. O la delturista que solo tiene el
objetivo de la "descarga sexual" a bajo coste. Pude ver la Cuba
real, donde sigue latiendo el pensamiento patriótico de Martí,
hecho realidad en Fidel y en la revolución triunfante.
En este corto viaje,
ningún tema quedo sin discutir entre los dos. Fuimos cómplices
de la nada. Nos declaramos eternos conspiradores. Solo nos falto
que hiciéramos la revolución mundial, pero decidimos postergarla
para el próximo viaje. Celia sueña con una "marea socialista"
que llegue a todas las playas del mundo. Y a mi me gusta este
sueño.
Lois Pérez Leira
Escritor
http://www.kaosenlared.net/noticia/celia-maria-hart-santamaria-marea-socialista